imagen-María José Dura Pau
En busca de ascenso desvirtúas
La pureza de espacios virginales
Contemplarte extasía los sentidos
Embriagas y dejas extenuada
Despertando los recuerdos.
El lustro de tus hojas enamora,
Doncella de altos vuelos,
Que buscas el Sol de tu triunfo
Trepadora de éxito logrado
De alisios desterrados.
Hipnotizas con tu canto de sirena
Galeones, con remeros fuertes
Al compás de tus notas de violín
Adormeces y transformas
En alabastro sus espíritus.
Pulidora de estrellas sin descanso
Te apoderas de abadías, de conventos
Los envuelves con tonos invertidos
Que la magia seductora de tu cuerpo
Desvirtúa la mirada de la obra.
Y si caes agotada en el esfuerzo
Sombras enmohecidas de ti
Como brisas, gnomos y viento
Serán huella permanente
De tu errante presencia
¡Hiedra que vas por la vida!
Sometiendo a tus encantos
Los ojos de los poetas
Los libros llenos de amor
¡Las auroras florecientes!
¡¡¡Brilla y deja brillar!!!
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